Si estás pensando en hacer una escapada a esta villa marinera, y dispones tan sólo de un día o de unos pocos para conocerla en su totalidad, te proponemos aquí 10 cosas que no debes perderte, una pequeña guía de rincones imprescindibles para que tu visita a Ribadesella sea más que completa. Si nos haces caso descubrirás el porqué de su gran fama turística.
1· La Playa de Santa Marina
2· La villa de Ribadesella
3· Puerto, Paseo de la Grúa y Ermita de Guía
4· Cueva de Tito Bustillo y Centro de Arte Rupestre
5· Descenso del Sella y motos de agua
6· Acantilados del Infierno y costa jurásica
7· Cuevona de Cuevas del Agua y aldeas de Ribadesella
8· Playa de Vega
9· Gastronomía, restaurantes y sidrerías
10· Cosas qué ver cerca de Ribadesella
1/ La Playa de Santa Marina
Es, probablemente, la playa urbana más bella de Asturias, y no sólo por su fisonomía, enmarcada con forma de concha entre el monte Somos con su faro y el monte Corberu con su ermita, es bella sobre todo por su urbanismo, por su amplia representación de casonas de ensueño a lo largo de un kilómetro largo de paseo marítimo. La playa de Santa Marina acumula casonas de indianos, mansiones, palacetes y chalets de la aristocracia y burguesía madrileña y regional de comienzos del siglo XX. También es una playa ideal para el baño y la práctica del surf, un entorno deportivo y dinámico, a escasos metros de enclaves de alto valor ecológico como el Parque Natural de El Malecón, un humedal muy bien conservado. El paseo debe rematarse hasta ambos extremos: la Punta´l Pozu por un lado, un mirador abierto al mar cantábrico, y la Punta del Arenal por el otro lado, donde Santa Marina se acerca a la desembocadura del Sella; desde ahí obtenemos una vista privilegiada de la villa riosellana.
Playa de Santa Marina
Existen pocas playas en el Cantábrico que dibujen una panorámica tan espectacular y que están circundadas…
2/ La villa de Ribadesella
El casco histórico y tres amplias calles fruto del ensanche urbano en los siglos XIX y XX, con sendas plazas: La Plaza Nueva y la Plaza vieja (o plaza de la Iglesia), son los hitos de un urbanismo ordenado y limpio que nos permite disfrutar del paseo y a la vez de amplias terrazas de restaurantes y sidrerías. La Calle principal es la Gran Vía de Agustín Argüelles, la vía comercial por excelencia, el escenario del mercado semanal de los miércoles. La peatonalización de sus calles hace que la visita a todos los rincones de esta villa sea muy cómoda. En nuestro recorrido encontraremos fachadas con escudos nobiliarios y soportales, palacetes como la casona de la Atalaya, la casa blasonada de la familia Ardines, el Palacio de Prieto Cutre (actual edificio del Ayuntamiento) o la casa natal de Darío de Regoyos. El casco histórico de la villa suma zonas con gran encanto como la Calle Oscura y el Barrio de Portiellu, el barrio de pescadores más antiguo de la villa. La playa de la Atalaya está en el mismo casco antiguo, es una cala de cantos rodados con los perfiles de los acantilados en sus inmediaciones. Un lugar obligado de baño para muchos riosellanos y puerta de entrada a otros Pedrales donde pegarse un baño en pozas naturales. En la Iglesia parroquial de Santa María Magdalena nos esperan unos murales majestuosos, obra de los artistas locales Uría-Aza, que en ningún caso podemos dejar de visitar.
Los murales de la iglesia de Ribadesella
La iglesia parroquial de Ribadesella alberga un tesoro contemporáneo, la obra monumental de tres artistas…
3/ Puerto, Paseo de la Grúa y Ermita de Guía
Podemos recorrer toda la ría desde la orilla opuesta a la playa. En el paseo de los vencedores una escultura rinde homenaje a los miles de palistas del Descenso Internacional del Sella. Frente al popular barrio el Cobayu, descubrimos el área natural de la Mediana y el Prau de San Juan donde se encienden las hogueras la noche más corta del año. Continuamos por el Paseo del Muelle, llamado Princesa Letizia (la hoy Reina de España veraneaba en Ribadesella). Barcos pesqueros, veleros, embarcaciones deportivas… podemos realizar una visita guiada a la lonja del Pescado, conocida como La Rula. En la calle Manuel Caso de la Villa, paralela al Muelle, lo mejor es degustar buen pescado y buenas tapas en cualquiera de los restaurantes que nos salen al paso. Tras el muelle comienza el Paseo de la Grúa, una vía peatonal muy bonita que recorre el tramo final de la ría del Sella hasta llegar a la zona conocida como la Cetárea. A medio camino nos topamos con una preciosa fuente con tallas de dos osos y una xana, es la Fonte’l Cai, también conocida como «La Fuentina», que rinde homenaje a una obra literaria de Pepín de Pría. En este mismo paseo existe un área temática de la mitología asturiana: Xanes, Trasgos, Cuélebres… y una serie de mosaicos cerámicos que ilustran la historia de Ribadesella desde la prehistoria hasta la actualidad, se trata de los conocidos como Paneles de Mingote, ya que su creador fue el humorista madrileño.
Ascender a la ermita de Guía es el colofón a este recorrido, desde aquí alcanzamos una panorámica que si no es la más bonita del Cantábrico le anda muy cerca. En pocos lugares puede disfrutarse de mar abierto, acantilados, río, ría, playa, montañas (todas las sierras del municipio con el picu Mofrechu sobresaliendo), puerto pesquero y cuidado urbanismo, todo a un golpe de vista, como una postal que cobra vida. En la ermita se encuentra la virgen del mismo nombre, protectora del gremio de los marineros, cuya festividad es una de las fiestas principales de Ribadesella. Desde aquí se vigilaba antaño el mar con fines defensivos; tres cañones de una fortificación medieval lo atestiguan. También fue una excelente atalaya para divisar ballenas. Podemos llegar a la ermita desde el final de El Paseo de la Grúa donde parte una escalera de piedra que salva 70 metros de desnivel; o bien a través del Camino a Guía que sale de la Plaza del Mercado o Plaza de la Atalaya. Una ruta un poco más larga pero más descansada que la anterior.
Mirador y ermita de Guía
Quien visite Ribadesella no debería irse sin antes haber disfrutado de su panorámica más extraordinaria….
4/ Cueva de Tito Bustillo y Centro de Arte Rupestre
Ribadesella puede presumir de tener a pocos metros de su casco urbano uno de los principales santuarios paleolíticos de Europa. En la cueva de Tito Bustillo se puede asistir en vivo y en directo a una exposición de arte rupestre deslumbrante. La cueva, donde se conserva la la mítica Galería de los Caballos, o el inédito Camarín de las Vulvas con figuras alusivas a los órganos sexuales femeninos, fue declarada Patrimonio de la Humanidad en 2008. Tanto Tito Bustillo -con un cupo diario limitado -, como la Cuevona de Ardines (en el mismo entorno y espectacular por su grandiosidad) son visitables, si bien es recomendable la reserva previa de fechas y horarios. En el Centro de Arte Rupestre de Tito Bustillo, anexo a la cueva, podrás conocer todo lo relativo al descubrimiento de Tito bustillo y sus pinturas, también disfrutar de todo tipo de actividades vinculadas con la prehistoria, muchas de ellas ideadas para los niños.
5/Descenso del Sella, motos de agua y mucho más.
Ribadesella fue pionera en las actividades de aventura en nuestro país, en especial con el popularísimo Descenso del Sella en canoa. Una excursión fluvial que año tras año convoca a familias y grupos de amigos de toda España. Ribadesella es en la actualidad una de las capitales internacionales del piragüismo. Desde hace casi un siglo su puente sobre el río es la meta del Descenso Internacional del Sella, una de las pruebas deportivas más antiguas del mundo. Otras actividades de turismo activo que han logrado consolidarse por ser trepidantes y aptas para todos los públicos, son los recorridos en lancha y en motos de agua por el litoral de los acantilados jurásicos, con incursiones espectaculares en las cuevas naturales que existen al pie de los mimos.
Descenso del Sella
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6/Acantilados del Infierno y costa jurásica
Todo el litoral riosellano forma parte de la llamada costa de los dinosaurios, donde se han hallado amplias muestras de fósiles, rastros e icnitas. El propio Museo Jurásico de Asturias se encuentra a pocos kilómetros de la localidad, en el vecino concejo de Colunga. Los acantilados del Infierno, justo en el límite geológico de la costa jurásica y la costa alta y caliza del concejo de Llanes, a la altura de la impresionante falla de la playa de Arra, abruman por su caída vertical al mar y el vértigo que provocan. Muy cerca, los Bufones de Pría, son saltos de agua sobrecogedores que «bufan» cuando el Cantábrico está bravo y el oleaje asciende por chimeneas naturales dentro de los propios acantilados. Un espectáculo inolvidable. La playa de Guadamía en esta zona oriental del concejo, es el punto final de una serie de castros, pedrales y farallones de ensueño: Arbidel, Arra, Infiernu, Palu Verde, Tomasón o Castru Arenes. En el litoral occidental destaca el pedral de Tereñes, pues conserva rastros de dinosaurios en muy buen estado y es el escenario de una ancestral celebración: la Fiesta del Pez. En las inmediaciones de la villa, los pedrales como la Atalaya, Borines, Xico, Socampo o Canales completan los atractivos de una costa donde abundan las calas de piedra y zonas de baños agrestes y desconocidas para el turismo de masas.
Los Acantilados del Infierno
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7/ Cuevona de Cuevas del Agua y aldeas de Ribadesella
Con el paso del tiempo este pintoresco acceso rodado al pueblo de Cuevas es un de los lugares más visitados del concejo riosellano, sino el que más. La Cuevona que sirve para el tránsito tanto de personas como de coches, nos sobrecoge por sus grandes dimensiones. Se trata de una gruta natural de casi 300 metros de longitud con todas las formaciones propias de una caverna. El bello pueblo de Cuevas, a orillas del Sella y al pie de la montaña, también nos sorprenderá por ser un lugar de cuento, muy acogedor y aislado del mundanal ruido. Se trata de la aldea del municipio con mayor número de hórreos, y desde aquí parte el recorrido etnográfico conocido como la ruta de los molinos. Podríamos decir que todos los pueblos de ribadesella merecen una vista, al igual que un rico patrimonio en torres medievales, capillas e iglesias como la de San Salvador de Moru donde se han descubierto recientemente unos murales renacentistas de gran valor. Algunas d eestas aldeas son lugar de paso obligado del Camino de Santiago, como Cuerres donde se celebra la Feria del Quesu, Collera, San Esteban de Leces, Berbes. Otras aldeas con mucho encanto como Ardines, Sardalla, Sebreñu, El Carmen, Meluerda, Camangu.
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8/ Playa de Vega
Hablamos aquí de una de las playas más agrestes, con un entorno indómito de gran valor medioambiental, reservada a los amantes de la naturaleza y de las playas casi vírgenes, muy representativa del “Paraíso Natural”. La playa de Vega abarca más de 1.600 metros de extensión de arenas blancas con un sistema dunar muy bien conservado y una curiosa geología. La playa es también uno de los templos del Surf en Asturias, y cuenta con un ambiente cosmopolita en sus chiringuitos. Para acceder a la misma playa circularemos a los pies del desfiladero de Entrepeñas, grandes agujas de roca apuntando al cielo que ya han sido declaradas Monumento Natural.
La Playa de Vega
Playa del Oriente de Asturias. La playa de Vega, en Ribadesella, es un enorme rincón…
9/ Gastronomías, restaurantes y sidrerías.
Ribadesella ya sólo merecería una visita por su gran oferta gastronómica, con calidad contrastada por todos lo rincones del casco urbano y del municipio, Sidrerías con vistas al acantilado como las de Tereñes, restaurantes a pie de playa como en la playa de Vega, chigres populares y restaurantes de postín en los rincones más insospechados de sus aldeas. Estrellas Michelín. La materia prima del mar y los pastos riosellanos favorece una gastronomía excelente y variada. También podría hablarse de una ruta riosellana de la sidra por el dominio de las sidrerías en el sector de la restauración. Además, Ribadesella es un escenario inmejorable para las comidas campestres en compañía de nuestros afines, con áreas recreativas en enclaves muy bellos, bien surtidas de parrillas y mesas para organizar nuestro propio festín.
Ruta riosellana de la Sidra
A pesar de que Ribadesella no cuenta con una tradición de producción sidrera sí se ha especializado en el…
10/ Cosas qué ver cerca de Ribadesella
Los atractivos turísticos y culturales son innumerables. Si dispones de más de un día para conocer Ribadesella no te importará moverte un poco en coche y acercarte a sitios fantásticos como el Museo Jurásico de Asturias , EL Mirador del Fitu, la sierra del Sueve, las playas de Caravia y Colunga, la villa de Lastres , la villa de LLanes , las playas de Llanes, Covadonga, Los Lagos de Covadonga y un largo etcétera.
Oficina de turismo: El Muelle. Tno: 985 86 00 38.
Ayuntamiento: Plaza de la Reina María Cristina s/n.
Texto: © Ramón Molleda para ribadesella.com
